Kuala Lumpur - Parte 1

A medida que uno se va acercando, lo mas sorprendente de la ciudad es lo verde que es. La carretera corre entre montañas y bosques tropicales, y las ramas brotan en profusion, casi cruzandose sobre los vehiculos. Aqui uno puede darse cuenta de que si alguna vez este lugar es abandonado, la naturaleza lo reclamara muy pronto.

La ciudad misma se encuentra ubicada en un valle cruzado por el Titiwangsa, que mas que rio, parece un simple arroyuelo, aunque por supuesto, como casi todos los rios tropicales, es proclive a las inundaciones subitas. Se nota que la ciudad debe haber crecido muy de repente. Casi no tiene areas antiguas, solo gigantescas moles - apendices monstruosos - indistinguibles entre si y que parecen ser la marca de la nueva era alrededor del mundo...

La estacion de buses, mas atestada que lo normalmente estan en otras ciudades, se encuentra en un sector popular de la ciudad. Muy cerca de la calle Petalin, centro del area China de la ciudad y meca de las imitaciones baratas. Tambien parece ser el centro de la pirateria de peliculas y musica. Los precios son ridiculamente bajos, y la calidad - al menos para mi ojo profano - indistinguible del producto real. Por todas partes, los vendedores gritan sus productos, o compiten tratando de atraer a los compradores a sus puestos.

Una de las maravillas de la ciudad es por supuesto el transporte publico. En Penang es un desastre, y la unica forma de moverse de un lado a otro - para alguien que no tiene vehiculo propio, como yo - es mediante taxis. En cambio aca tienen el tren urbano y el monorail. Ambos limpios, eficientes y baratos. Quiza el unico reclamo sea lo dificil que es acceder a las estaciones, ya que parecen o estar todas colgadas en el aire, al final de largas escaleras, o mas bien escondidas tras edificios de modo que solo es posible acceder a ellas a traves de largos tuneles.

Sin embargo a pesar de lo poblado del lugar, uno se siente en medio de un jardin. Donde sea que han plantado flores, todo esta inmaculado. No es posible decir lo mismo del Titiwangsa, que se arrastra, sucio y barroso, entre paredes de concreto. Sin embargo de un rincon estan surgiendo ahora los atrayentes olores de uno de los tantos restaurantes locales. Quiza sea hora de dejar de escribir y alimentar el cuerpo...

Comentarios

Unknown dijo…
It's a very good piece of writing you've got here. i am glad all your wounds have been wiped.

Entradas populares