Ayer, aprovechando que estaba en en el casco antiguo, pase a visitar el antiguo cementerio anglicano. Ahora es solo un sitio historico, puesto que nadie se ha enterrado ahi por sobre 100 años. Pero es un lugar bastante interesante. Ubicado al lado de una de las calles de mas trafico en Georgetown, bajo arboles centenarios, es un sitio de bastante paz. El espacio es bastante pequeño, comparado con otros cementerios que he visitado.
Sin embargo la melancolia que impone la medialuz que se filtra por entre los espesos ramajes de los arboles, y el sonido apagado de los pasos, al pisar sobre el espeso manto de hojas le brindan una sensacion especial al silencio que flota en el ambiente. En una esquina una lapida recuerda a la joven hija de un misionario, muerta y sepultada en alta mar. Latitud y longitud indicadas. Una tumba vacia en un cementerio abandonado.
Mas alla, un joven ingeniero, muerto a la edad de 22 años. Por aca, una familia completa, muerta de "fiebre de la jungla" en el espacio de 24 horas. Retazos de historias sin continuacion. Bajo sus antiguas lapidas se pueden encontrar a los primeros gobernadores ingleses, a las familias importantes de la lejana colonia, a almirantes y generales, todos cubiertos de una espesa capa vegetal y de un moho que lentamente va carcomiendo la piedra y el estuco, el marmol y el bronce. Una vision imponente de todo un mundo que poco a poco se va desmoronando bajo la presion de la vegetacion tropical, las lluvias incesantes y el fuerte sol.
Ayer, aprovechando que estaba en en el casco antiguo, pase a visitar el antiguo cementerio anglicano. Ahora es solo un sitio historico, puesto que nadie se ha enterrado ahi por sobre 100 años. Pero es un lugar bastante interesante. Ubicado al lado de una de las calles de mas trafico en Georgetown, bajo arboles centenarios, es un sitio de bastante paz. El espacio es bastante pequeño, comparado con otros cementerios que he visitado. 
Sin embargo la melancolia que impone la medialuz que se filtra por entre los espesos ramajes de los arboles, y el sonido apagado de los pasos, al pisar sobre el espeso manto de hojas le brindan una sensacion especial al silencio que flota en el ambiente. En una esquina una lapida recuerda a la joven hija de un misionario, muerta y sepultada en alta mar. Latitud y longitud indicadas. Una tumba vacia en un cementerio abandonado. 
Mas alla, un joven ingeniero, muerto a la edad de 22 años. Por aca, una familia completa, muerta de "fiebre de la jungla" en el espacio de 24 horas. Retazos de historias sin continuacion. Bajo sus antiguas lapidas se pueden encontrar a los primeros gobernadores ingleses, a las familias importantes de la lejana colonia, a almirantes y generales, todos cubiertos de una espesa capa vegetal y de un moho que lentamente va carcomiendo la piedra y el estuco, el marmol y el bronce. Una vision imponente de todo un mundo que poco a poco se va desmoronando bajo la presion de la vegetacion tropical, las lluvias incesantes y el fuerte sol.
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